Este sábado nos
visita un vecino bien conocido el Betis.
Dirigido por Pepe Mel que en éstos años
ha hecho del Betis un equipo a su imagen y semejanza.
¿Cómo es este Betis?
Básicamente se comporta igual que el año pasado. Cuenta con
prácticamente la misma plantilla y se ha
reforzado, esta vez sí, bien en todas las líneas. Este era uno de sus puntos
débiles: solamente
tenía 11 ó 12 jugadores de garantías, este año tiene 18 ó 19.
Es un equipo a la medida, repetimos, de la personalidad de su
entrenador: fuerte, sólido, exigente,
atrevido, rápido y valiente. Y a veces le pierde su exceso de intensidad:
ayer 4 amarillas y 2 rojas, Perquis y
Campbell.
Si repasamos la
historia del fútbol, muy pocos nueves en
la historia del fútbol han llegado a triunfar como entrenadores. Mel lo fue: un nueve impetuoso, estilo tanque, poderoso, enérgico, con mucha
fuerza, bien de cabeza, decidido, no se arrugaba nunca y de los que se pegaba
con sus defensores.
¿Por qué no han sido ni son buenos entrenadores los nueves?
Esta pregunta podría
responderla con mucha mayor precisión que yo cualquier psicólogo deportivo. Son muy suyos, van a su bola, sólo tienen
en mente una cosa: meter gol, el remate lo llevan en sus venas y eso de asistir
a un compañero, contemporizar y pensar no va con ellos.
Con ese perfil físico y psicológico han jugado y han sido entrenados, por ello les falta el pensamiento, la
reflexión, el sosiego, la visión panorámica del juego. Siempre tienen en mente y están pendientes de una sola cosa: del balón
y de cómo irse de sus defensores.
Esta reflexión viene a cuento porque Mel está triunfando en la 1ª
División y dota a sus equipos no sólo de sus virtudes
humanas y como jugador, sino que además, por su apuesta de juego y por la estructura táctica de sus equipos,
parece un entrenador que haya sido más
un jugador de medio campo organizador: un 4, 6, 8 ó 10 que han sido y son
la mayoría de los entrenadores de fútbol.
Ha dotado a su Betis de una estructura táctica reconocible, siempre plantea
los partidos de una forma valiente, atrevida, impulsiva, al ataque y a ganar,
nunca especula. Esto le genera mucho gasto
físico y en las segundas partes el equipo lo va acusando poco a poco.
Se ha salvado de la
quema de bajar por eso mismo, porque gana
muchos partidos pero los pierde también; el año pasado fue el 6º equipo que
más partidos perdió y en esta ya comienza, véase el Rayo (0-1) y ayer con el Atleti (2-4)
Casi siempre ha jugado un 1-4-4-2.
En la portería el año pasado Mel, se repartieron la titularidad Fabricio y Casto, ahora se
siguen alternando con 2 y 3 partidos. Es
el único equipo que lo hace.
La defensa de 4 titular es prácticamente la misma que el año pasado
exceptuando que Paulao, ahora lesionado para dos semanas,
le ha cogido la delantera a Dorado.
También utiliza al francés Perquis, Mario y a Amaya.
Cuenta con dos laterales técnicos, profundos y con buen manejo de
balón: Nelson, que de momento le lleva la delantera a Angel, ex del Villarreal, lo que habla mucho y bien de este
jugador.
En la izquierda el incombustible Nacho, técnicamente bueno con balón pero lo más
frágil de la defensa bética. En la recámara cuenta también con Chica, ex del Español y con Alex Martínez
en la izquierda.
En el medio campo la baja de Iriney la ha solventado de manera
formidable por la progresión de Beñat y la aparición de Rubén Pérez, buen
jugador (parecido a Camacho con más técnica pero
menos pelea).
De momento Mel, está contando también con Salva
Sevilla, un buen jugador pero que no
es un pivote nato y sí un media punta, con Cañas, y con Nono del B del estilo de Salva
Sevilla.
La línea de ataque solo ha sufrido una variación: se ha ido el intermitente Jefferson Montero y ha
venido, ¡ojo! un jugador de banda
derecha que es un ciclón el portugués Agra, un futbolista que estéticamente no es atractivo y que nos puede
recordar a Carlitos el ex del
Sevilla: pequeño, fornido, culo bajo,
etc., no resulta bonito de ver, pero que tiene fuerza, velocidad y sacrificio.
Es eficaz y continuado.
En la izquierda aparece otra novedad Juan Carlos, un estilista en banda, muy técnico pero con
escasa capacidad de sacrificio. Pero hay que atarle en corto. Porque a
veces te la monta. Por ahí por la banda
de Gámez y Joaquín debe llegar el mayor peligro malagueño.
Este año, la irrupción de Pozuelo por detrás del punta, ha hecho que su
estilo varíe a veces al 1-4-2-3-1. Como en estos 2 últimos partidos.
Arriba Jorge Molina y Rubén Castro, J. Pereira e incluso el zurdo
Campbell son garantía de profundidad y pegada.
Desactivar a Rubén Castro será determinante. Este jugador el año pasado participó en casi el 50% de los goles de su
equipo. El Betis acabó con 47 goles y Rubén hizo 16 goles
y 5 asistencias de gol. Formidable.
Así es este Betis, un equipo organizado desde el ataque, que juega
siempre el balón –pierde muchos- y que juega a ganar o a perder y que plantea
partidos de ida y vuelta.
Por ello:
El año pasado fue el 6º equipo más goleador.
El año pasado fue el 6º equipo más goleado.
El año pasado solo dejó su portería a cero en 8 partidos. El 2º peor.
Y este año es el equipo después del Barça que necesita menos llegadas
al área (11) para marcar gol.
¿Cómo se comportará el Málaga de Pellegrini?
El partido le llega
bien al Málaga. No perdió en Bilbao y su
rival se ha dejado la piel, los puntos y varios jugadores contra el Atleti.
Solo una sombra en el horizonte, el
Anderlecht el miércoles, pero
parece que hay tiempo para la recuperación.
El Málaga ha de insistir en su juego de posesión, esto desgastará aún más al Betis y
deberá aprovecharse del juego de estrategia aéreo este sábado. Auguro algún gol de remate de córner o de falta.
Pellegrini, cuyo perfil es la antítesis de Mel como jugador: un central o libre, sereno, reflexivo, organizado que, como
entrenador aplica y construye a sus equipos desde su visión panorámica del
juego y desde la defensa, deberá optar
otra vez por el 1-4-1-4-1, introduciendo a Portillo en lugar de Toulalan, quizá Sergio Sánchez vuelva a tener su oportunidad y seguramente
estará el ex bético Santa Cruz.
Para el estilo de juego del Betis parece más adecuado este jugador que Saviola, ya que podrá fijar a sus centrales y echarles hacia su portería,
haciendo largo al Betis, que es cuando es más vulnerable. También su poderío aéreo puede ser definitivo para el remate o para
las asistencias.
En definitiva, polos opuestos en los banquillos, habrá goles y veremos
quién sale ganando. Apuesto por el Málaga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario