No fueron tan feroces |
Comentábamos
que el Málaga en Sevilla tenía un reto: demostrar lo bueno que es fuera de casa ante un
rival de entidad y que es en estos campos donde había de ser incisivo y
atrevido en ataque.
Demostró las 2 cosas
y una tercera; saber sufrir cuando el rival te aprieta mucho.
Esto
hizo el Sevilla, desde el inicio, someterle a una presión tremenda que hizo que durante
20’ la derrota sobrevolara por el Pizjuán. Pero el viento y el juego del Málaga se la llevó a la portería contraria.
En el 2º tiempo,
al Sevilla, que jugó prácticamente con los mismos jugadores que en Mallorca en Copa el jueves, el desgaste físico les pasó factura, y también
se quedó con un hombre menos y el fútbol
control del Málaga acabó desquiciándole.
Demichelis imperial, todavía habría que hacer más grande la foto. |
Como muestra de ello, es que el Málaga acabó con 3’ menos de posesión que el Sevilla, pero
acabó con más pases efectuados y mayor eficacia de los mismos.
Demichelis imperial: merece especial atención; estuvo muy bien atrás y excepcional como pivote en
la 2ª parte. Su participación fue decisiva, estuvo en el 41% de jugadas
de su equipo y transformó el partido.
Para
muestra un botón: recibió 40 pases y dio otros 40 a sus
compañeros; solo tuvo 7 pérdidas e hizo 11 aperturas a banda y todas fueron ok!
Soberbio.
Recordar ahora que el año pasado ya fue determinante
en las mismas condiciones -lesión de
Toulalan en la jornada 27- el Málaga estaba en Champions (4º) y todo el
mundo pensaba que sin el francés el equipo ya no sería capaz de continuar arriba; pues bien en los 11 partidos que restaban
Demichelis jugó en esa posición de pivote; se ganaron 5 partidos, se empataron
3 y se perdieron 3 y se consiguió la Champions con él en el pivote (4).
Comentábamos
que el Sevilla era
el equipo que más penaltis hacía y tarjetas rojas recibía de la Liga. Sumó de nuevo en los 2 apartados y Fazio
hizo un 2x1 igualito que en Mallorca, ya que le habían expulsado el jueves
en una jugada idéntica con Emilio N’Sue.
Santa Cruz fundamental |
Pellegrini
apostó -como pedíamos- por Santa Cruz en detrimento, de inicio de
Saviola. No pudo estar más acertado.
A pesar de que el delantero no lució en lo vistoso para el público: el
remate y el gol; fue clave en muchos
aspectos del juego que pasan desapercibidos a la gran mayoría: sus movimientos,
contemporizaciones, las faltas reiteradas que sufrió (el que más del
partido), la fijación que significó para
los 2 centrales, especialmente de Spahic; su ayuda defensiva (el que más
faltas realizó junto con Camacho), en la
estrategia defensiva -ni un solo remate de faltas laterales ni de córners
por fin recibidos- y la liberación en
esas tareas ofensivas para Camacho, Weligton -casi marca- y Demichelis que marcó.
Fue
vital también porque en la estrategia de salida directa que de vez en cuando
realiza Caballero, casi siempre le busca a él, y
así fue en el gol: 10” de duración, 4 jugadores distintos que intervienen
y muchas de las
acciones y pases que existen en el fútbol se encontraron: pase largo de Caballero, Santa Cruz hace un control orientado increíble
en medio campo a la altura del 4º arbitro y sobre la cal, y con dos toques, uno
a bote pronto, asiste en corto a Jesús Gámez y éste de primera realiza la asistencia
soñada a Joaquín -penalti y gol-.
El
Málaga fue, de nuevo, pura dinamita defensiva. Saliendo a presionar arriba con 4 o 5 jugadores la
salida de balón del Sevilla, y éste
hizo lo mismo. Camacho (15
recuperaciones, el que más del partido) estuvo fantástico, como casi
siempre.
Camacho tremendo en la recuperación |
La
línea de 3 del Málaga estuvo desconectada porque el Sevilla presionaba defensivamente muy bien tanto a Isco como a Joaquín ya que Eliseu
estaba muy pendiente de las ayudas a Monreal y las subidas de Coke.
Magistral su dirección del partido |
Comentábamos
que Pellegrini acertó con Santa Cruz, pero ayer dio de nuevo una clase
magistral de dirección del partido.
El cambio de Iturra al descanso, la entrada de
Sergio Sánchez y el adelantamiento de Demichelis cambió radicalmente el partido
a favor del Málaga.
También
el cambio ofensivo de Saviola fue valiente e impidió que el Sevilla se creciera,
y el de Portillo lo hizo también en el momento justo.
En
definitiva un baño de autoestima para todos; jugadores, técnicos y afición, que
sigue asombrando con su fútbol a todo el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario