GETAFE 1 - MALLORCA 0. Un partido inesperado.

En un campeonato liguero de larga duración es normal que tengas partidos y circunstancias de todo tipo: jugar bien y perder, jugar mal y ganar, sin suerte o con suerte, con arbitrajes desfavorables o favorables.

Estas circunstancias, ni las favorables ni las desfavorables, no se suelen acumular en los partidos ni tampoco suelen repetirse semana tras semana. Aunque hay veces que sí. Que se lo pregunten a Mel y a su Betis.

Viene esto a cuento porque después de 5 partidos sin que ocurriera nada anormal, el Mallorca ayer se tuvo que enfrentar en el inicio y al final del partido a la mala suerte en los remates y para tener al principio del partido una decisión arbitral que dinamitó el partido.

Y no se comportó nada mal jugando con esa inferioridad numérica desde el minuto 10.

Contábamos que el sábado Mel, cuando le ocurrió lo mismo y en el mismo minuto, no solo no fue capaz de reflexionar y tener una visión clara del partido que quedaba por jugar sino que favoreció, con sus contradictorios cambios tácticos, el terremoto de juego posterior del Málaga.

Ayer Caparrós nos dio, de nuevo, otra lección táctica en la dirección de los partidos: fue tomando decisiones tácticas reflexivas, consecuentes, atrevidas y valientes que ayudaron a  sobrevivir a su equipo, a mantenerse en pie y no perder la cara al partido hasta el final.

Y ¡qué final! Todavía estarán preguntándose Nunes, Arizmendi y Luis García como no entró ninguno de esos remates.

Analicemos en detalle como Caparrós reaccionó tácticamente a todos los contratiempos y a todas las dinámicas del partido.

Minuto 10. Roja a Ximo. No realiza ningún cambio automático, mantiene a sus jugadores y solo retoca 2 posiciones: Emilio en el lateral y Víctor baja a la medular a ocupar su puesto. Pasa a jugar un 1-4-4-1.

Minuto 22. Realiza el primer cambio. Viendo que el Getafe basculaba ofensivamente por la banda izquierda donde se situaban Diego Castro y Miguel Torres, y a Víctor y Emilio les costaba pararlos, hace entrar a Nunes por Pereira y pasa a jugar con 3 centrales y 2 carrileros, manteniendo por dentro a Joao, Pina y Víctor. Pasa a un dibujo de 1-5-3-1.

Es en el minuto 36 cuando Luis García empieza a intranquilizarse por lo que ve y hace un cambio radical, entra Pedro León que se sitúa en banda derecha y sienta a un pivote defensivo Lacen.

Minuto 54: Tras el gol afortunadísimo del Getafe, Caparrós da otra vuelta de tuerca a su esquema: sienta a Hemed y entra Arizmendi. Este se sitúa por detrás de Víctor al que saca de la medular y le pone en punta, y vuelve a una defensa de 4: Geromel, Nunes, Conceiçao y A. López. En el centro del campo sitúa a 3 hombres abiertos Emilio, centro derecha, Joao centro y Pina centro izquierda. Pasa a un dibujo de 1-4-3-1-1.

Con este último y novedoso estilo casi saca el empate.

En ningún momento realiza cambios defensivos sino que dentro de su inferioridad numérica los realiza para no perder la cara al partido. Y vaya si lo hace.

Estos movimientos tácticos son para aprenderlos en las Escuelas de Entrenadores.

Ahora centrémonos en los datos estadísticos post-partido. Al verlos descorazonaría a cualquier seguidor del Mallorca, y pensaría –si no hubiera visto el partido- que el Getafe abrumó al Mallorca en todos los aspectos del juego. Nada más lejos de la realidad.

De todas formas analicemos los datos, desfigurados por esa inferioridad numérica durante 85’.

• La posesión del Getafe llegó al 71% y dio 369 pases más que el Mallorca.
• El Getafe realizó 24 remates, y 9 jugadores participaron en ellos. Solo Abraham no remató al Mallorca y claro, Moyá.
• El Getafe hizo 44 centros al área y sacó 12 córners.

Pues bien con toda esta catarata de situaciones, el Mallorca aguantó el tipo, no naufragó en ningún momento y solo permitió 3 jugadas en su área.

Paradas Romero: Su tercer encuentro de Liga. Un perfil pronto al silbato y arbitraje contradictorio. Otro más.

• Pita una media de 32 faltas por partido.
• Saca una media de 7 amarillas por partido.
• Ha sacado ya dos rojas.

Datos elocuentes de su perfil irreflexivo, escasamente dialogante y con la pistola – el silbato- siempre a punto.

La roja a Ximo, pareció excesiva, por el desarrollo de toda la jugada: se realizó en una zona del campo sin peligro alguno; Ximo fue a interceptar –eso sí de una forma peligrosa- el posible control de Diego Castro con el balón dividido y no tiene intención alguna de dañar al rival sino de interceptar el balón. Y no hay lesión por la entrada.

Juego brusco grave y tarjeta amarilla. Los gritos de socorro de Diego Castro, el ser rodeado ipso facto por 5 azulones y su cercanía a la jugada -estaba a 2 metros- debió influenciarle decisivamente estimando mucha animosidad y violencia en la entrada para decretar la expulsión de Ximo.

Contradictorio: 2ª parte Pedro León hace una entrada peligrosísima a Aouate con los tacos por delante sin posibilidad de tocar el balón y le pega en el costado. Hay violencia e intención. Tarjeta amarilla.

Y más contradicciones pero no nos vamos a extender…….pasa cada domingo.

En cualquier caso el Mallorca es después de 6 partidos, el 2º equipo menos goleado y el más sólido defensivamente de la Liga: los rivales necesitan hacerle 28 remates para meterle gol. Mejor que el Málaga y Sevilla (2º y 3º)

Pero ha de haber, poco a poco, un giro radical en algunos aspectos del juego que son de momento bastante negativos:

• Es el equipo que más remates recibe por partido.
•  Es el equipo que más centros al área recibe.
• Es el equipo que más córners recibe.
• Aouate es el portero que más interviene de la Liga.

En definitiva, aspectos sustanciales a mejorar y el próximo partido contra el Granada se presenta como una ocasión pintiparada para mejorar sus números. Que haya suerte.